Hemos perdido ya la cuenta de las fotos que se han sucedido a partir de aquella primera realizada, justo hoy, hace 8 años. Nunca hubiéramos imaginado celebrar un cumpleaños así y al final, se ha convertido seguramente en una fecha inolvidable que quedará marcada de forma muy especial en la vida de esta pequeñuela.
La soledad de estar encerrados en casa ha sido rota a cada instante por todos los medios imaginados e inimaginados. A las llamadas de teléfono y videoconferencias, se han sumado cartas y postales enviadas con premeditación y alguna que otra en mano, paquetes, regalos recolectados entre compañerxs de trabajo, y otros muchos realizados a mano. No han faltado las felicitaciones por vídeo donde incluso el piano y el violín ha sonado a gloria desde pequeñas virtuosas manos.
Aunque para banda sonora la de las voces de todo un vecindario que desde las ventanas han versionado hasta tres cumpleaños feliz diferentes en distintos momentos.
Hubiera sido imposible dar cabida en casa a tanta gente que hoy se han querido asomar a felicitar a la pequeña Inés... y mira que en mil ocasiones nos hemos apretado bien juntitos haciendo burla a los escasos metros cuadrados de la vivienda.
Hoy hemos querido recopilar lo que han sido estos años, que son toda una vida para Inés, y que con el broche de este día han conseguido dejarla emocionada y agradecida como nunca antes la había visto. Así que sólo queda decir: Gracias a todxs por hacerlo posible. Y con el día de hoy hemos pasado ya la cuarentena, y aquí seguimos. Aunque así en bajito... (Hoy, después de 41 días, los niñxs han vuelto a pisar la calle, invitados por la policía y ¡menuda sensación!)